¿Conoces la historia de los transitarios?
Desde el ordenador o dispositivo móvil en el que estamos leyendo este artículo, quizás alguno de los alimentos que hoy hemos desayunado... todo lo que nos rodea tiene que ver con el transporte internacional de mercancías, con los transitarios.
Los transitarios (agentes de carga o Freight Forwarders, en inglés) son especialistas en la gestión, control y en la coordinación del transporte internacional de mercancías. El paralelismo más utilizado, para entender su función, es la de una agencia de viajes.
El transitario es una “agencia de viajes” para el transporte de mercancías, él decidirá cuáles son los medios idóneos para llevarla de un lugar a otro ofreciendo las mejores propuestas para su cliente.
En los últimos cien años nuestra sociedad se ha convertido en una sociedad global.
Antiguamente, los seres humanos consumíamos todo aquello que nosotros mismos hacíamos o cultivabábamos. A medida que nuestra civilización ha ido creciendo y haciéndose más compleja, el transitario (Freight Forwarder) ha ido creciendo en importancia.
Los mercados son muy variados y cada área, cada país, no dispone de todo aquello que necesita. Por ello, el transporte internacional se ha desarrollado para asegurarnos que, a pesar de la zona geográfica en la que estemos, podamos tener todo lo que necesitamos.
Se cuenta que los primeros transitarios fueron los propietarios de lugares de alojamiento en Londres que tenían que guardar y devolver los efectos personales de sus huéspedes a sus lugares de residencia habituales. La misión inicial de estos hosteleros era organizar el transporte a través de contratos con diferentes transportes y transportistas.
Así, curiosamente, los primeros transitarios no fueron hombres de negocios experimentados que vieron la oportunidad de un nuevo negocio. Sin embargo, a medida que este sector iba creciendo, se hizo necesario la actuación de intermediarios, de agentes de carga, para gestionar la organización de estas importaciones y exportaciones.
Así nace la figura del “transitario”, una empresa o persona que organiza los embarques y el transporte para particulares o compañías que les ayuden a conseguir que las mercancías lleguen desde el fabricante o productor hasta el cliente o punto final de distribución y lo hace a través de un contrato con terceros. El agente de carga no mueve necesariamente la mercancía, sino que actúa como un experto en la cadena de suministro.
Thomas Meadows y Company Limited de Londres está considerado como uno de los primeros agentes de carga. Las mejoras en el transporte ferroviario y el transporte cada vez más fiable en los barcos de vapor, generó un crecimiento repentino de la industria del transporte de carga, incrementado por el desarrollo del comercio entre Europa y América del Norte. Ahora, las responsabilidades del expedidor incluía temas como asesoramiento sobre la documentación y los requisitos de las aduanas en el país de destino.
El corresponsal o agente en el extranjero se hacía cargo de las mercancías y mantenía informado sobre cualquier asunto que afectase a la circulación de las mismas. En la actualidad, el transitario asume las mismas responsabilidades.
Los transitarios o agentes de cargo solían organizar el envío de las mercancías con la contratación de diversos medios de transporte y debían y también asesorar sobre la documentación y costumbres del país de destino. Sin embargo, en muchas ocasiones surgían imprevistos que perjudicaban al transportista y dejaban al cliente insatisfecho. Los transitarios tenían que asegurarse de que toda la logística se llevara correctamente para satisfacer, sobre todo, a sus clientes.
Esto los obligó a convertirse en proveedores de servicios completos: planificación, envío, seguimiento, entrega, facturación, etc.), así como la gestión de clientes, proveedores, socios, transportistas (por tierra, mar y aire), de los agentes de aduanas y organismos oficiales; debían conocer las leyes internacionales y regulaciones, las diferentes monedas en curso, idiomas, etc. En resumen: debían ser capaces de enviar cualquier producto, desde cualquier lugar a cualquier parte del mundo y por diversos medios de transporte.
En la actualidad sus tareas no han cambiado mucho: sigue gestionando y coordinando el movimiento de las mercancías hasta llegar a su destino, trabajando en algunas ocasiones con sus agentes y en otras a través de sus propias delegaciones.
La evolución del transporte de mercancías se dirige hacia el transporte en contenedores. El transitario es cada vez más «consolidador»: agrupa la mercancía o carga para rentabilizar el transporte de un contenedor u otra unidad de carga.
El grupaje o consolidación contribuye a la reducción de los costes del transporte. Se basa en cargar en un solo contenedor diversas mercancías de distintos clientes con un mismo destino. El transitario las agrupa en sus almacenes antes de la partida y su corresponsal volverá a separarlas en los almacenes del lugar de llegada para distribuirlas a sus destinatarios.
Las asociaciones relacionadas con el sector son la FIATA (Federación Internacional de Asociaciones de Transitarios), CLECAT (European Association for Forwarding, Transport, Logistic and Customs Services) y, en España, las diferentes ATEIA (Asociación de Transitarios, Expedidores Internacionales y Asimilados) locales.
El transitario y sus funciones fueron reconocidos en España por la Ley de Ordenación del Transporte Terrestre (LOTT) en 1987. El objetivo fue mejorar su imagen, evitar el intrusismo y reconocer la labor de este sector.